
EL PADRINO, Francis Ford Coppola, 1972
Para inaugurar este blog, nada mejor que comenzar con la película que inspira la frase de cabecera.
Siempre hay que revisar los clásicos. Es importante hacerlo con nuevos ojos, para descubrir si la etiqueta que les cuelga sigue vigente. Por eso en este primer post os animo a todos a que veáis de nuevo, o por primera vez, El Padrino.
LA FAMILIA
Encontraréis mucho más que una peli de gansters. Os adentraréis en la trastienda de una familia, poco convencional, que se verá forzada a luchar por su supervivencia en un Juego de tronos contra el resto de clanes, en el que como ocurre en la serie, “O ganas o mueres”.
Los papeles principales de padre e hijo están interpretados por Marlon Brando y Al Pacino. Gracias a sus poderosas interpretaciones os bastarán los primeros seis minutos para quedar fascinados por el carismático Don Vito Corleone y comprender lo que significa estar dentro o fuera de la Familia.
Sin embargo, a pesar del poder que ostenta el Don, tras rechazar la oferta de introducirse en el tráfico de estupefacientes, estalla una guerra que se irá recrudeciendo hasta hacer necesario que don Vito acelere la sucesión. A su pesar, Michael Corleone tendrá que asumir el mando.
UN GUIÓN MAGISTRAL
Este film supuso una verdadera revolución en la forma de narrar. Destaca su guión, escrito a cuatro manos por Francis Ford Coppola y Mario Puzo, con la ayuda adicional de Robert Towne, clave para conseguir el clásico que hoy tenéis entre manos.
Si caéis en las redes de la primera parte, acabaréis pidiendo más. Pero tranquilos, porque hay otras dos partes que completan la trilogía.
Paladeadla con moderación y vosotros decidís a qué familia se ajusta más la de los Corleone, Lannister o Stark.
(Foto: Muy interesante.es)