
LADY MACBETCH, William Oldroyd 2016
La película Lady Macbeth es la propuesta perfecta para vosotras chicas del siglo XXI. Y todo varón moderno que os quiera acompañar.
Preparados, que viajamos en el tiempo.
SER MUJER EN EL SIGLO XIX
Si alguna vez os habéis preguntado en que consistía ser mujer allá por el siglo XIX, ésta es vuestra oportunidad de asomar el ojo a la cerradura de un hogar acomodado de esa época.
La primera parte del film transmite muy bien el ambiente claustrofóbico en el que se mueve la protagonista. Una joven recién casada, que aterriza en un austero caserón gobernado por su suegro. La relación de mutuo aborrecimiento que entabla con su marido, no ayuda a mejorar las cosas.
Así que aquí tenemos a la recién llegada, en su supuesto nuevo hogar. Desubicada, como si fuese un jarrón que mueven de un lugar a otro. Un cero a la izquierda en un reino regido exclusivamente por hombres, que la tratan un poco peor que al ganado del establo.
PSICÓPATA EN POTENCIA
Craso error, caballeros porque esta muchachita es de armas tomar. Casi podría decirse que es una psicópata en potencia, a la que riegan y abonan hasta que florece.
Es entonces cuando emprende su propio camino, con la audacia del que sabe que no hay vuelta atrás. Por lo tanto estará dispuesta a jugárselo todo con tal de no ceder ni un palmo del terreno ganado.
El rol de Katherine, está interpretado por la estupenda Florence Pugh, un verdadero descubrimiento, que imprime a su personaje esa mezcla de inocencia y dureza, que la hace tan inquietante.
Lo cierto es que en esta película, los hombres cometen un error peor que el de ser villanos, y es el de subestimar a las mujeres.